La Asociación Colombiana de Hidrógeno fue una de las grandes entidades que participaron del pasado mega evento físico denominado “Latam Future Energy Andean Renewable Summit”, el cual fue organizado por Future Energy Summit (FES) en el JW Marriott Hotel de Bogotá.
Durante la cumbre que reunió a más de 400 referentes del sector renovable de Latinoamérica, Juan Pablo Reyes, miembro de la Junta Directiva de la Asociación Colombiana de Hidrógeno, brindó su perspectiva del avance de la Hoja de Ruta de H2V del país.
“Es importante tener un horizonte, pero hay que ser conscientes que pasaron dos años desde que se publicó y que otros países lanzaron la suya. En su momento contemplaba el mercado local mas no de exportación y cuando se mira el documento, al 2050 se espera que el sector más demandante sea el de transporte con 1,2 millones de toneladas”, inició.
“Sin embargo, el país debe enfocarse en la generación, hay que duplicar la matriz energética y, para eso, se deben contemplar todos los activos renovables no convencionales”, afirmó durante el panel denominado “Hidrógeno Verde: ¿El nuevo tesoro de Colombia?”.
Cabe recordar que Colombia fue uno de los primeros países de la región en lanzar su estrategia nacional de hidrógeno y, de acuerdo con la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA), al 2040 se posicionaría como el cuarto país más competitivo a nivel mundial.
¿Por qué? El objetivo de la Hoja de Ruta de H2V de Colombia es que, al 2030, se pueda producir en el Caribe norte, donde se concentran recursos eólicos y solares muy por encima de la media mundial, a un precio de 1,7 dólares por kilo de hidrógeno verde, mientras que a 2050 se espera que el kilo de hidrógeno verde y azul ronden el dólar.
A ello se debe añadir que, la proyección del país es que, hacia los próximos 10 años, haya entre 1 a 3 GW de capacidad para electrólisis, lo que supone entre 1,5 y 4 GW de capacidad instalada de renovables dedicada exclusivamente a la producción de hidrógeno.
Por lo que Juan Pablo Reyes planteó la duda de por qué no pensar en expandir aún más los objetivos para ser aún más ambiciosos en un mercado internacional en el que habrá más competidores, considerando que otros países de Latinoamérica también ya plasmaron sus metas, como el caso de Argentina, Chile y Uruguay, entre otros.
“Si Colombia podría tener el cuarto costo de hidrógeno más competitivo en el mundo en el 2040, ¿por qué no le apuntamos más? Y para avanzar frente a eso, hay que enfocarse en la generación”, manifestó.
“Además, si no hay acceso a la red, entonces queda muy en el aire cómo hacer los proyectos”, agregó quien es miembro de la junta directiva de la Asociación Colombiana de Hidrógeno.