Powertis, empresa del Grupo Soltec, fue una de las nueve empresas que resultó ganadora en la pasada subasta a largo plazo de energías renovables de Colombia. Lo hizo a precios de 129,9 y a 138 pesos por kWh.
Bajo el nombre de Arrayanes, la compañía adjudicó 530.079 kWh/día, seleccionados todos en el bloque 2, que serán generados a través de su emprendimiento Manglares, de 99,9 MW (135 MWp).
“Nosotros somos una empresa seria, vamos a cumplir y en 2023 vamos a estar entregando energía. A lo mejor no es de esa planta, porque quizá no nos dé el tiempo para la construcción, pero nosotros vamos a cumplir nuestro compromiso”, aseguró Juan Carlos Ruíz, Gerente de Powertis para Colombia.
En esa línea, el directivo resaltó que el Grupo Soltec tiene grandes expectativas sobre Colombia, al punto que se proponen al 2025 contar con 1 GW de proyectos de energías renovables en ese país en diferentes etapas, desde desarrollo hasta en operación comercial.
Pero para ello, Ruíz señaló que el Estado debería dar algunas señales más ambiciosas. Por un lado, la planificación de subasta de energías renovables a mayor plazo de inicio de construcción plazo, teniendo en cuenta que para la subasta del 2019 el período de construcción fue de 3 años (enero del 2022) y la de este 2021 es de tan solo 1 año).
“Pensamos que es bueno para toda la matriz eléctrica colombiana que haya una planificación a largo plazo de la incorporación de renovables no convencionales”, sostuvo.
Además, el Gerente de Powertis propuso que los beneficios tributarios de la Ley 1715 puedan aplicar a un rango mayor de jugadores. “Sería interesante que se pudieran aplicar las desgravaciones que hace el Gobierno a la fase de desarrollo, porque realmente estimularía mucho más la velocidad y la capacidad de inversión para hacer las cosas más rápido”, opinó.
También sugirió que “sería muy importante que se redujeran los tiempos” burocráticos para el acceso a tales beneficios, teniendo en cuenta que muchas veces se dan demoras en respuestas de informes y solicitudes necesarias para aplicarlos.
“Todo el mundo quiere que las plantas estén en operación en menor tiempo posible, el consumidor, el gobierno y el productor; ese es el objetivo final”, indicó Ruiz y aseveró que con iniciativas como Manglares no sólo bajarán el precio de la energía para los usuarios, sino que generarán puestos de empleo.